Uno de los principales carotenoides presentes en los alimentos que producen color es la luteína.
La luteína junto con la zeaxantina, son poderosos fitonutrientes (químicos de las plantas) que sin ser esenciales como las vitaminas y minerales llegan a ser nutrimentos para la salud de los humanos.
La luteína es un pigmento que proviene principalmente de la flor de cempasúchil de origen mexicano, que se adiciona en el alimento del pollo, la cual, al ser ingerida por él, se deposita en su piel y en sus tejidos grasos y le proporciona un color amarillo característico del pollo mexicano.
Al ser humano, la luteína le sirve como antioxidante natural.
Estudios realizados han demostrado que la luteína, es un potente antioxidante celular y que tiene particular importancia en prevenir ciertas afecciones de los ojos, principalmente en los adultos, ya que ayudaría a prevenir la degeneración de la mácula del ojo.