Redacción: Mtro. Hugo Valadez
La anemia es un problema mundial de salud pública con importantes consecuencias para la salud humana. En 2002, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estimó que la anemia, resultante de la deficiencia de hierro (ID, por sus siglas en inglés), fue una de las principales causas de enfermos en el mundo.
La anemia y anemia por deficiencia de hierro (IDA, por sus siglas en inglés anemia and iron-deficiency anemia) se asocia con una disminución de los procesos mentales (función cognitiva), cambios en el comportamiento, retraso en el crecimiento y desarrollo infantil y deterioro de la función inmune en niños. Un estudio reciente estimó que la pérdida de coeficiente intelectual a gran escala en niños estadounidenses es mayor que la pérdida por trastornos como el autismo o lesiones cerebrales traumáticas.
Se estima que el 47% de los niños en edad preescolar en todo el mundo tienen anemia, la mayor prevalencia de cualquier grupo de población. El principal factor de riesgo de identificación entre los niños pequeños es la baja ingesta de hierro en una etapa en la que el requisito de hierro es alto.
En un estudio realizado entre 2009 y 2010 a 263 niños sanos entre 1.5 a 6 años en Jerusalén, aprobado por el comité de Helsinki de la Organización Médica Hadassah, Jerusalén en Israel. Los padres fueron entrevistados con el fin de conocer sus dietas, características sociodemográficas, de salud y nutricionales, además se realizaron muestreos sanguíneos de cada niño, utilizando como referencias celulares y recomendaciones de hierro de este estudio los criterios de la OMS.
Los resultados arrojaron que el 11.2% de los niños tenía anemia y el 3.7% anemia por deficiencia de hierro, la prevalencia de anemia fue significativamente mayor en niños pequeños de 1.5 a 3 años en comparación con los niños de 3 a 6 años.
Se encontró una alta prevalencia de anemia entre los niños en la zona de Jerusalén de Israel. La principal explicación de las altas tasas de identificación fue el bajo consumo de carne roja a pesar del consumo relativamente frecuente de aves de corral. El contenido de hierro en el pollo es bajo en comparación con otras carnes como la carne de res o el cerdo.
Estos hallazgos subrayan la importancia de las prácticas alimentarias adecuadas y el consumo diversificado de varios tipos de carne. Por lo que se debe hacer hincapié en la importancia de una dieta saludable y equilibrada que incluya una variedad de alimentos y carne que contengan hierro.
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Fuentes:
Journal of Pediatric Gastroenterology and Nutrition. Anemia and iron deficiency in children: association with red meat and poultry consumption. Consultado el 30 de diciembre de 2020 de: https://journals.lww.com/jpgn/Fulltext/2013/12000/Anemia_and_Iron_Deficiency_in_Children__.9.aspx